Tiempo de espera, quiero unas vacaciones.....

Esta soy yo en las vacaciones pasadas del 2006, embarazada de 7 meses, haciendo yoga en la costanera de Piriápolis.

Estoy esperando, esperando y esperando... Aguardando alguna noticia que nos dé certezas...

Todavía no se han definido algunas cosas en el trabajo de mi esposo, sabemos que nos mudaremos pero por trámites burocráticos aún faltan algunos pasos, y mientras tanto esperamos y desesperamos, más que nada por pensar en todo lo que hay que hacer y cómo organizarse!

Yo mientras tanto cual hormiguita voy desaciéndome de muuucha ropa que venía "coleccionando" desde los 12 años más o menos, jajaja!!! He sacado afuera como 20 bolsas de ropa muy viejita que no sé la verdad para qué guardaba.... Muchos papeles antiguos, muuuchos apuntes de la facultad que ya no leo ni leeré, hasta hojas de carpeta de la secundaria, alguien me puede decir para qué las guardaba??

Así que hace días que estoy en eso, y también juntando cajas, y guardando mis objetos más delicados, voy apuntando todo lo que guardo y decidiendo qué quiero ver en la nueva casa y qué no, ese es mi punto de partida, porque si pienso en si siento algo por cada cosa, entonces no tiro nada!!

Para colmo amigas, les cuento que teníamos fecha para el 28 de febrero para bautizar a mi beba, y el 27 cumple dos añitos, así que me pareceeee.... que el cumple será en Salta, y el bautismo deberá postergarse... No es fácil mudarse tan lejos, pero lo venimos añorando desde hace tantos añosss.......

Bueno, entre tantos preparativos, quiero contarles que esta noche es especial para nosotros ya que nuestra bebé está dando un pasito para ser una nena; hoy pasó de la cuna a la cama, un gran cambio si los hay!!!

Ella estaba tan feliz de ver que dormiría en una camita como la de su hermana, que tuvo un ataque de alegría, corría, daba vueltas, reía sin parar, y así estuvo hasta la hora de dormir, en que estalló en un gran llanto. Mi esposo desesperó y se sintió culpable, pero saben qué hice? Empecé a hablarle a mi hija, le conté que yo sabía que ella se sentía mal porque estaba dejando de ser bebé, porque ya no dormiría en su querida cunita, pero que ya era tiempo de pasar a la cama, que la cuna le quedaba chica, que la golpeaban los barrotes, que ya era suficientemente grande para dormir en una camita. Y saben qué pasó? Como si entendiera mis palabras, se calmó, se acurrrucó un momento a mi lado y se durmió tranquila entre suspiritos y pequeños sollozos... Dicen que a los bebés siempre hay que explicarles las cosas, como si nos entendieran (yo pienso que nos entienden), y saben qué? Siempre me da resultado...